*la cesta puede tener un color ligeramente diferente Cuidar una cesta de rosas es similar a cuidar un ramo. Aquí tienes cómo cuidar una cesta de rosas: Cuidado del agua: Verifica regularmente el nivel de agua en la cesta. Mantén la espuma o el Oasis (material que absorbe agua) en la cesta húmedos pero no empapados. Cuando la espuma comience a secarse, simplemente agrega más agua para mantener tus rosas frescas e hidratadas. Ubicación de la cesta: Encuentra un lugar adecuado para la cesta. Similar a un ramo de rosas, debes mantener tu cesta de rosas alejada de la luz solar directa. La exposición prolongada a la luz solar directa puede secar las rosas. Para una longevidad óptima, debes mantener tus rosas en un lugar fresco, lejos del calor y la sequedad. También debes alejar tus flores de frutas frescas. Ya que las frutas emiten gas etileno, que puede hacer que las flores se marchiten. Limpieza de la cesta: Debes quitar los pétalos o las hojas caídas de tu cesta de rosas, ya que los materiales en descomposición pueden hacer que se reproduzcan las bacterias en tu cesta de flores. Esto no solo ayudará a que tu caja de flores luzca mejor, sino que también aumentará la longevidad de tus rosas frescas. Manejo con cuidado: Sé delicado al mover o transportar la cesta para evitar dañar los delicados tallos y flores de rosa.